Traducciones financieras en lengua sueca
Nuestros traductores sueco<>español de documentación financiera y bancaria son especialistas que ya han trabajado en el sector y ahora se dedican a la traducción. La mejor combinación es trabajar con traductores financieros especializados en los mercados de Suecia…, pero con una amplia experiencia como lingüistas.
Nuestros traductores nativos suecos o hispanohablantes están familiarizado con el lenguaje de las finanzas y la economía, poseen experiencia en textos financieros y aplican un control de calidad sistemático para revisar la traducción final en sueco o español.
Al igual que las traducciones jurídicas y comerciales, las traducciones financieras en lengua sueca se utilizan en todos los ámbitos privados y comerciales. Nuestros servicios están enfocados a bancos e inversores, y también a bufetes de abogados, aseguradoras, notarías, constructoras, hoteles, mútuas médicas, ministerios y organizaciones sin ánimo de lucro.
Los inversores quieren estar bien informados
Antes de invertir en tu empresa o negocio, estos inversores ubicados en Suecia querrán ver informes anuales, notas de prensa o presentaciones. Y lo más importante: querrán disponer de información precisa y accesible en sueco.
Un traductor profesional español<>sueco ofrece un servicio que te ayuda a transmitir toda esta información a tus potenciales clientes e inversores suecos. En primer lugar, la web de un banco correctamente traducida al sueco permitirá a sus clientes acceder en cualquier momento a los datos y estadísticas de sus cuentas. En segundo lugar, una correspondencia comercial en un sueco fluido facilitará la comunicación entre las partes. Por último, traducir correctamente los informes financieros mejorará la imagen de marca facilitando a los accionistas datos fiables.
Cualquier banco que desee operar más allá de sus fronteras y establecerse en Suecia deberá afrontar el coste de estas traducciones. ¿Quieres atraer a inversores que hablen cualquiera de los dialectos de la lengua sueca? La solución es traducir.
Los bancos con filiales en Suecia necesitan una coherencia de marca
Si tu banco o entidad financiera lleva muchos años operando en Suecia, tus clientes confiarán en ti porque tu imagen corporativa transmite tus valores y refleja la calidad que ofreces. Tu imagen mejora con una traducción y localización de calidad, realizada por traductores nativos de sueco que sepan adaptar tus campañas de marketing y tus mensajes a la cultura sueca. Nuestra agencia de traducción ofrece todo tipo de servicios de traducción español<>sueco: subtítulos en videos explicativos, testamentos o formularios de la Agencia Tributaria.
Desde Citigroup hasta el Santander: todos los bancos internacionales conocen la importancia de una imagen corporativa coherente. Estos bancos invierten en marketing una parte importante de su presupuesto, sobre todo para llegar a clientes extranjeros (de Suecia o de cualquier lugar del mundo). Recuerda que, en mercados emergentes con diferencias lingüísticas, demográficas y culturales, el éxito depende del reconocimiento de marca.
Personaliza tus contenidos
Los bancos e instituciones financieras suministran a las empresas un capital que atraviesa fronteras culturales y lingüísticas. Y lo más importante, sus servicios ayudan a emprendedores a crear riqueza y a aumentar el PIB de su país.
Para poder internacionalizar estos servicios, necesitan hablar a sus clientes en su propio idioma (español, sueco, etc) y ganarse su confianza. La traducción hace que esto sea posible. En lugar de invertir parte de tu presupuesto en solucionar las consecuencias de unas traducciones financieras deficientes, tendrás la seguridad de que tus contenidos representan fielmente los valores de tu empresa. Una traducción personalizada de sueco se enfoca en tus clientes y mercados suecos, lo que se refleja en tus resultados.
Al fin y al cabo, una comunicación precisa y correcta permitirá a tu banco expandirse a mercados como los de Suecia.
Banca
Bancos y particulares nos confían sus traducciones al sueco. Sucede a menudo que los bancos abren sucursales en otros territorios como Suecia…donde la lengua oficial es el sueco y no la de la sede central. Aquí es donde se necesita un proveedor fiable de traducciones. Lo mismo sucede con regiones con una importante población de inmigrantes que no hablan la lengua oficial del país. Estos bancos y particulares necesitan traducciones precisas y claras en sus transacciones diarias.
En las traducciones bancarias de sueco de informes anuales y financieros, y otros documentos bancarios, no existe margen de error. Además de colaborar con profesionales especializados y altamente cualificados, aplicamos un minucioso control de calidad y, si el cliente lo solicita, las traducciones son revisadas por segundos traductores suecos.
Seguros
Los documentos de seguros tienen importantes implicaciones legales, tanto para la persona que compra el seguro como para la compañía que lo suministra. La traducción de documentos de seguros al sueco es un ámbito muy especializado que requiere conocer tanto el idioma como el sector de los seguros en Suecia.
La traducción al sueco de documentos de seguros debe ser impecable. La adopción de nuevas tecnologías nos permite ofrecer precios asequibles. Intentamos ajustar nuestras tarifas en la medida de lo posible sin comprometer la calidad. Todas las traducciones sueco-español o español-sueco son sometidas a un exhaustivo control de calidad lingüística.
Documentos
Traducimos al sueco documentos como:
Estados financieros
Cuentas anuales
Formularios fiscales
Pólizas de seguros
Balances de situación
Registros contables
Nóminas
Informes de viabilidad
Otros idiomas
Otros servicios en sueco
¿Necesitas ayuda?
Presupuestos de traducción sueco<>español
¿De dónde viene el sueco?:
El sueco es una lengua germánica septentrional hablada por unos 10 millones de personas en Suecia (Sverige). En 2007 había 290.000 hablantes nativos de sueco en Finlandia, y 2,4 millones de hablantes como segunda lengua. Se estima que en 2010 existen unos 300.000 hablantes de sueco en países distintos de Suecia o Finlandia. Muchos viven en los Estados Unidos, Reino Unido, España y Alemania, y también en otros países escandinavos, Francia, Suiza, Bélgica, los Países Bajos, Canadá y Australia.
El sueco está estrechamente relacionado con el noruego y el danés, y sus hablantes suelen entenderse entre sí.
Finlandia estuvo gobernada por Suecia desde el siglo XII hasta 1809. Durante ese período, el sueco fue la principal lengua del gobierno y de la educación. Hoy en día, el finlandés y el sueco son lenguas oficiales en Finlandia.
Antes había comunidades de habla sueca en Estonia (Estland). Cerca de un millar de esos suecos emigraron al sur de Ucrania después de que Estonia pasara a formar parte del Imperio Ruso en el siglo XVIII. Allí crearon un pueblo conocido como Gammölsvänskbi (Pueblo Sueco Antiguo), que ahora forma parte de Zmiivka (Зміївка). Muy poca gente habla todavía sueco en esta zona. Durante la Segunda Guerra Mundial, otros sueco-hablantes huyeron de Estonia a Suecia. Sólo muy pocas las personas en Estonia que todavía hablan sueco hoy en día.
Entre los años 800 y 1100 d.C., se hablaba en Suecia un dialecto del nordeste antiguo conocido como sueco rúnico. Se escribía en el alfabeto rúnico. Se diferenciaba sólo ligeramente del dialecto nórdico antiguo de Dinamarca, o danés rúnico. Las dos lenguas comenzaron a separarse durante el siglo XII.
El sueco apareció por primera vez en alfabeto latino en 1225 en la ley westrogoda (Äldre Västgötalagen), el código de derecho utilizado en la provincia de Gothland Occidental (Västergötland). La lengua de este texto se conoce como Sueco Antiguo Temprano (klassisk fornsvenska o äldre fornsvenska), que se utilizó hasta aproximadamente 1375. Gramaticalmente era mucho más complejo que el sueco moderno.
Entre 1375 y 1526, el idioma de Suecia se conocía como Sueco Antiguo Tardío (yngre fornsvenska). Había sufrido una simplificación gramatical y un cambio de vocales, y para el siglo XVI tenía más en común con el sueco moderno. Durante este tiempo, el sueco tomó prestadas muchas palabras del latín, del bajo alemán y del holandés.
La traducción de la Biblia al sueco en 1526 se considera que marca el comienzo del sueco moderno. Ayudó a establecer una ortografía consistente para el sueco, aunque la ortografía utilizada en la traducción no era completamente consistente. Por ejemplo, las letras ä y ö se utilizaron en lugar de æ y ø, y å reemplazó a o en muchas palabras.
Las reglas modernas de la ortografía sueca fueron creadas por el autor Carl Gustaf af Leopold, por encargo de la Academia Sueca (Svenska Akademien). Su propuesta fue publicada en 1801, y finalmente adoptada por la Academia en 1874. La ortografía fue reformada en 1906, y dicha reforma sólo fue respaldada plenamente por la Academia Sueca en 1950.